La crisis de comienzos de siglo hizo que siete mujeres jachalleras se reunieron para conformar una asociación y desarrollar un micro emprendimiento que les permitiera generar ingresos para ayudar a sostener a sus familias. Comenzaron formando una granja de pollos que luego faenaban y comercializaban. Ahora, con el aporte del Seminario de Alianzas de Minas Argentinas, incorporaron equipamiento para ser más productivas, ampliar sus servicios y mejorar la rentabilidad de la asociación.
Decidieron llamarse Grupo Nuevo Mileno porque comenzaron el trabajo allá por el año 2.000. La cría, faena y venta de pollos eran una fuente de ingreso para estas 7 mujeres del distrito la Frontera, ubicado a unos 20 kilómetros al norte de San José de Jáchal. La calidad de sus pollos, criados en granja y sin conservantes ni aditivos, les hizo ganar popularidad con rapidez en el departamento del norte. Este año se presentaron en el Seminario de Alianzas de Minas Argentinas y, tras ganar el 4° premio, obtuvieron equipamiento para ampliar sus servicios y mejorar sus ganancias.
“Siempre vendíamos los pollos crudos desde nuestras casas o en la feria en la plaza, ahora podremos, también, asarlos y venderlos listos para comer, prestar nuestros servicios en la Fiesta de la Tradición, en cumpleaños o en cualquier otro evento”, contó Susana de Perez, una de las integrantes de la asociación.
La agrupación ya contaba con algo de equipamiento que les facilitó el INTA de Jáchal, como una “mesa de sacrificio” (una estructura metálica con 8 conos de aluminio en los que se colocan los pollos para su matanza y desangrado rápido y sin machucar su carne) y una desplumadora automática que, en cuestión de segundos, deja al animal listo para el eviscerado.
A ese equipamiento se suma lo que Minas Argentinas entregó a través del Programa Seminario de Alianzas: 2 freezer de 2 puertas, 1 parrilla portátil, 1 anafe con quemador de 24.000 calorías, 2 hornos eléctricos de 80 litros de capacidad y 2 mesas grandes con 25 sillas.
Todo este equipamiento tiene por objetivo, por un lado, facilitar el trabajo de las mujeres que conforman esta asociación y permitirles aumentar su productividad y, también, ampliar el tipo de servicios que brindan, ya que ahora podrán trasladarse para asar los pollos “a domicilio” o prestar el servicio en ferias, eventos o fiestas particulares.
“Nos gusta mucho poder acompañar este tipo de emprendimientos que, si bien son pequeños, son muy concretos, eficientes y generan ingresos genuinos para un grupo de familias de La Frontera. Estas mujeres vienen trabajando y contribuyendo con el sostenimiento de sus familias desde hace 17 años y ahora podrán hacerlo mejor, más rápidamente y con más rentabilidad, y eso es verdadera sustentabilidad”, sostuvo Mario Hernández, vicepresidente de Minas Argentinas S.A.
